________Cuaderno Ð Madrona____

   

  Portada -- Fotografías -- Edificios -- Notas Historia -- Creadores -- Localización -- Más Đ Madrona -- Parajes

 

Creadores

 

Lauro Ayuso de la Calle. Piedra

 

La afición por labrar piedras le llega a mi padre cuando decide construir la casa en el Camino de La Losa.

Más que una afición, en este momento es un requerimiento de la dinámica constructiva, por cuanto sólo cuenta con un albañil al que hay que proporcionarle las piedras ya seleccionadas y labradas.

La casa lleva todos los ángulos en piedra de abajo hasta la cornisa, más los frentes, dinteles y pilares de los porches.

Antes de iniciar la obra, él ya tiene apartados unos buenos montones de piedras calizas listas para su colocación con argamasa de cemento blanco.

Y comprobó que, aun sin conocimientos especiales, incluso sin herramientas (no quiso que le regalara yo un juego más profesional) tan sólo con un hacha, una alcotana y cortafríos, el se entendía a la perfección con las distintas clases de caliza, a las que llegó a conocer muy bien.

Acabada la casa en 1984, continuó esa afición y el trato con las piedras.

Los acarreos más importantes los hizo mi cuñado Olegario Martínez Zurdo con un tractor.

En alguno de ellos también participé y ambos recibimos alguna clase práctica de cómo hay que tratar las piedras para trabajar menos.

Pero desde entonces mi padre ya no se desprendió de ese afán tranquilo por las piedras.

Salía con su Renault 4-L Súper al campo; seleccionaba las que mejor le parecían; las labraba allí mismo y, una vez preparadas, las echaba al coche.

Tuvo que cambiar los cuatro amortiguadores del R-4-L varias veces porque choscaban (terminología propia).

Aún labradas, a veces eran muy grandes y, al verlas ya en casa, yo le preguntaba:

- Pero, ¿cómo has conseguido manejarlas tu sólo?

- Llamando a Mañas - contestaba.

Y es cierto que, para tratar con las piedas, como con todo lo demás, es más importante la maña que la fuerza.

Nunca tuvo incidentes manejando piedras.

Este entretenimiendo cesó cuando por imposiciones de la edad y la salud, ya resultó imposible.

Aun así dejó un buen montón de piedras labradas por si hacen falta.

 

Banco
Torrecilla sobre rocalla. Rocalla. Banco.

 

Basamento para figura
Jardineras

 

 

Otra vista de la torrecilla sobre rocalla

Basamento y castillete

 

Obelisco sobre columna

 

Mesa de dos piezas. Ceniceros visigodos. Brocal
Castillete sobre roca

 

Año de 1994. Lauro con su alcotana perfila piedras calizas.

A la derecha, arco sobre cimbra con destino a la tierra del Santo Cristo.

Su nieto Fernando le hace compañía.

 

Jardineras y montón de piedras preparadas.

 

Fin de esta presentación

 

* * *

<-- anterior árboles para la vida ... sigue -->